Cuestionario hecho por Carlos Martini, de Radio Cáritas, sobre la situación en el mundo, en este subcontinente y en Paraguay, vía abordaje amplísimo sobre temas candentes de actualidad.
Se analizan brevemente las guerras declaradas y puestas en práctica en tres zonas diferentes, todas ellas con altísimo poderío militar y con armas nucleares que pueden degenerar en una conflagración nuclear. Así mismo las campanas de alerta lanzadas por el IPPSE sobre la grave situación energética en nuestro país, cuyos primeros síntomas fueron los apagones de luz ocurridos hace un par de semanas en varias ciudades del interior y en barrios de Asunción. Son interpretados como un anuncio aciago sobre el futuro inmediato, en los que se pueden producir apagones aún más prolongados. Se denuncia también el Plan Maestro de la ANDE, pletórico de buenas intenciones, pero sin presupuesto suficiente para atender las necesidades del sector eléctrico.
En estas condiciones, el futuro es sombrío. La situación actual no es responsabilidad de los Gobiernos anteriores, tampoco del actual y menos aún de los Gobiernos del futuro cercano, los que llevarán la peor parte de un black out aún mayor. Por otro lado, se aborda la advertencia, hecha por la UPAP, revista científica de la Univeridad Politécnica y Artística del Paraguay, en el sentido de que no existen normas jurídicas que regulen el uso de Criptomonedas en Paraguay, lo que conduce a la conclusión de que las Criptominerías se encuentran fuera de la legalidad. Además, en el mundo moderno de los países democráticos, como los EEUU, la UE, Japón, Corea del Sur, Australia, Nueva Zelandia, entre otros, existe unanimidad sobre el hecho de que las Criptominerías y las Criptomonedas no cuentan con controles en ningún lugar del mundo, siendo gravemente peligrosas por tal carencia.
Ergo, mejor no trabajar con ellas en ningún lugar, menos aún en Paraguay. Finalmente, pero no por eso en último lugar de importancia, el análisis de coyuntura local es contradictorio dependiendo del ramillete de indicadores que se pretende utilizar. Si son sólo los de coyuntura, Paraguay se encuentra bien, sobre todo en crecimiento del producto y en el control de la inflación; está en situación relativamente regular en lo que concierne al combate contra la indigencia total y a favor de la integración de las MIPYMES en materia de asistencia técnica y crediticia, que es escasa. Y last-not-least, la política de respeto al medioambiente deja mucho que desear. En tiempos de cambio climático, es poco lo que se encuentra haciendo Paraguay para proteger la existencia de bosques. Peor aún, la política para protegerlos hasta ahora ha fracasado.