En el vaivén de contactos entre Paraguay y Taiwán vs China continental lo ideal sería que nuestro país pudiese seguir teniendo intercambios económicos (comercio exterior de bienes y servicios) así como asistencia técnica de Taiwán. En los hechos y ya por décadas, eso se ha logrado con los taiwaneses, no con China continental. Suponiendo que ahora surgiese la posibilidad de tener intercambio comercial también con el gigante asiático, lo importante para nuestro país sería hacerlo también con él, pero siguiendo sus inmejorables vínculos con Taiwán.

DESEABLE. Como llevamos ya décadas de relacionamiento productivo con Taiwán en términos de cooperación, corresponde afianzarlos, analizando cuidadosamente la posibilidad de iniciar un relacionamiento comercial con la China continental.

NO DESEABLE. Lo que Paraguay debe evitar es caer víctima del enfrentamiento entre ambas Chinas. Nuestro país desde siempre ha reconocido la soberanía de Taiwán y es bueno e irrenunciable que esto siga así, en cooperación in crescendo. Así mismo, es de esperar que esta buena relación con Taiwán no sea obstáculo para que nuestro país pueda entrar en intercambio comercial con la China continental.

DESIDERATUM. Paraguay haría bien, es mi opinión, en rechazar todo tipo de presión o extorsiones de la China continental intentando lograr ésta que nuestro país tome distancia de Taiwán o deje de reconocer la soberanía de la isla ante las ambiciones hegemónicas de la China autocrática.

DIFERENCIAS CUALITATIVAS ENTRE AMBAS CHINAS. Según el Índice de Libertad Económica de la Fundación Heritage, en Washington DC, Taiwán figura en el ranking de las sociedades como una de las más democráticas, con un desarrollo económico, social, ambiental y tecnológico que la posiciona entre la docena de países más modernos y más competitivos del mundo, también en materia de salud, educación, defensa y seguridad. En términos de cooperación (comercio exterior de bienes e intercambio de servicios así como asistencia técnica) ha sido con Paraguay bien generosa. A cambio, nuestro país ha reconocido siempre la soberanía de Taiwán y da sus votos en organismos internacionales en favor de que ese estatus no sucumba ante las ambiciones imperialistas de la China comunista.

EXPANSIONISMO DE XI JINPING. La China de Xi por el contrario constituye uno de los peores totalitarismos en Asia y en el resto del mundo. Su negación total de los principios democráticos y del respeto a las libertades públicas así como el rechazo a las autonomías religiosas y étnicas dentro de su propio territorio hacen de la autocracia china una de las más temidas. Véase lo que ha pasado últimamente con el protectorado de Hong Kong, en vil desprecio del acuerdo de “un país, dos sistemas”. Lo ha sometido ahora totalmente a los dictados de Beijing con la reforma de leyes electorales en la otrora zona de protección británica: ahora, sólo los “patriotas” podrán presentarse en las elecciones de la ex metrópoli financiera. Definición oficial de “patriota”:  “conforme con el mandato unipersonal y de por vida de Xi Jinping bajo la dictadura del partido comunista, totalmente apoyados por los militares” de igual signo.

LA RUTA DE LA SEDA. La autocracia de la China continental se ha convertido en una de las economías más grandes del mundo, con un nada subestimable poderío tecnológico y militar, a disposición del partido comunista. El imperialismo de Xi Jinping, su partido y sus militares se halla omnipresente en el mundo vía comercio exterior, créditos y asistencia técnica que son la punta de lanza de la expansión autocrática del régimen. Esto se observa claramente en África, América Latina y gran parte del Asia. Su nueva “ruta de la seda” en estas latitudes es un ejemplo patente de influencia china de ese tipo.

PARAGUAY. Nuestro país podría hallarse también a merced del autócrata expansionismo chino. Ojalá predomine aquí la adhesión al Estado de Derecho en Democracia, regida por valores afines a la dignidad humana y respetando libertades públicas, religiones y etnias, hacia el desarrollo sostenible. Comerciar con la China continental sí, pero sin renunciar a la cooperación con Taiwán, reafirmando la adhesión paraguaya a la soberanía de ésta. El Instituto de Desarrollo del Pensamiento Patria Soñada (IDPPS) de Asunción comparte el contenido de esta columna.

Dr. Ricardo Rodríguez Silvero

Necesitas contactarnos?